Has visto, verdaderamente has visto la nieve, los astros, los pasos afelpados de la brisa... Has tocado, de verdad has tocado el plato, el pan, la cara de esa mujer que tanto amás... Has vivido como un golpe en la frente, el instante, el jadeo, la caída, la fuga... Has sabido con cada poro de la piel, sabido que tus ojos, tus manos, tu sexo, tu blando corazón, había que tirarlos había que llorarlos había que inventarlos otra vez.

sábado, 22 de diciembre de 2007

De sillas


Cuand0 volví, mi silla estaba ocupada. Pensé en protestar, en llorar, en sentarme sobre quien ocupaba mi lugar, en golpear al intruso y obligarlo a abandonar el asiento. Todo eso medité durante un largo rato. Y luego implementé cada una de esas cosas, en ese orden y repetidas veces.
Al cabo de un tiempo, hice lo más sano. Me levanté, me sacudí, me sequé las lágrimas.
Y me busqué una silla que estuviera vacía.

3 comentarios:

Ulises hijo de Angeles dijo...

:) Hiciste lo más sano, después de haber hecho lo conveniente. Eso es lo bueno. (humilde comentario)

wallychoo dijo...

Es mejor una silla vacia que una llena de Odios !!!

Abrazo, Buen Año

Princesita azul dijo...

Gracias Ulises! Lo sano cuesta, lo sano cuesta...

Wallyzz!!! Otra vez pasando por aquí! Qué gusto y qué alegría. Gracias por tus palabras.

Buen año para los dos.