Has visto, verdaderamente has visto la nieve, los astros, los pasos afelpados de la brisa... Has tocado, de verdad has tocado el plato, el pan, la cara de esa mujer que tanto amás... Has vivido como un golpe en la frente, el instante, el jadeo, la caída, la fuga... Has sabido con cada poro de la piel, sabido que tus ojos, tus manos, tu sexo, tu blando corazón, había que tirarlos había que llorarlos había que inventarlos otra vez.

jueves, 21 de febrero de 2008

Fidel

Quién tuviera la mitad de los cojones, la voluntad y la dignidad de este hombre.

Gracias Fidel, te debo lo poco de fe que me queda.