![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgCy3oSfwSfvo3QbbbPEfph5WK80Afrwr77aaaoFihoZaOQh_8kdJrg8iECmk-slala9XkdobXJCaLKMk_CXPefVK3o024dcrp21DyoCZqX5a4XX4znu5pc8H25kk3A7hbOvP-MKQ/s320/caleidoscopio-laspina.jpg)
Siempre tuve un tema con las despedidas. No me gustan.
Pensar que la mayoría de la gente que conocemos en este momento, es sólo compañía temporaria, que tarde o temprano, por un motivo u otro, dejará de pertenecer a nuestro mundo, o por lo menos, a nuestra cotidianeidad.
Seres cercanos, no tan cercanos, a los que queremos con toda el alma, o ni siquiera nos despiertan simpatía. Seres que suman miles de estrellas a nuestra vida, o los que pasan por ella casi indiferentemente.
No importa qué relación nos una, lo cierto es que cuando una persona de mi mundo deja de pertenecer a él, siento que un personaje de mi película desaparece. Y el vacío no deja de sentirse, en mayor o en menor medida.
Como cuando termino de leer un libro, y me entristezco porque se acabó ese mundo para mí... y nunca más volveré a saber de sus personajes...
Y ahora, mientras escribo esto, se me viene a la mente un caleidoscopio que tenía cuando era chiquita, y al cual adoraba.
Como alguna vez leí por ahí: lo importante es entender que todos y cada uno de ellos cumplió una función en nuestra vida. Y a veces, hay que dejarlos ir para que otros puedan llegar.Vida caleidoscópica.Nuevos dibujos en cada vuelta de esquina.
1 comentario:
sí... a mí tampoco me gustan.
SE NOTA!?!?
Publicar un comentario